Después de nuestro estreno en viajar con la bici por el Camino de Santiago, sentíamos la curiosidad de lanzarnos a otros países y por qué no, al más cercano que tenemos, ya que es toda una aventura, por sus gentes, su cultura, su naturaleza y en definitiva es el comienzo de África.

En este viaje fuimos cuatro los que cruzamos el estrecho y nos aventuramos por el Medio y Alto Atlas de Marruecos. Me acompañaron Antonio Platero, José Luis Rubio y Jesús Gasset.
Fuimos desde Algeciras a Ceuta y allí nos encontramos con un antiguo conocido mío de otros viajes, el Sr. Alami. Nos acompañó en furgoneta hasta la población de Azrou, donde comenzamos a pedalear en dirección al bosque de cedros y a las montañas nevadas del medio Atlas. Hicimos noche en las cascadas de Oun Er Rbia y al siguiente día nos dirigimos hacia Midelt, pero haciendo noche con una familia que se dedicaba a tejer alfombras.
Una vez en Midelt nos encontramos de casualidad a unos familiares de Antonio Platero y por mediación de ellos nos quedamos en una iglesia cristiana con un párroco de Málaga que llevaba 30 años sirviendo a los más necesitados.

Al siguiente día emprendimos viaje dirección a Imilchil en la que nos esperaba, según mi criterio, la parte más bonita del viaje, a su vez también la mas dura y por supuesto llena de experiencias con las familias con las que nos quedábamos a pasar la noche.
Fuimos bordeando ríos, atravesando montañas y cerca de los 3.000 metros nos encontramos nieve en el camino, lluvia y frío. Después de tres días llegamos a Imilchil, visitamos los lagos, el mercado y tomamos rumbo a Agoudal, Ait Hani y las Gargantas del Toudra.
Al llegar a Tinerhir acabamos el pedaleo para coger un autobús dirección a Marrakech y disfrutar de la plaza del Jne fna y en tren llegar hasta Tánger.

Todavía se me ponen los bellos de punta cada vez que hablo de este viaje, tal vez por que fue el primero en el que salimos de España y que nos impresionó tanto nuestro vecino Marruecos.

---